Bienvenida e introducción: Mariano Barbacid, Consejo Científico. Fundación Ramón Areces. Felipe A. Calvo, Universidad de Navarra. Enrique Ruiz Escudero, Consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid.
La protonterapia es la modalidad de radioterapia externa de mayor precisión. Utiliza una tecnología singular que mediante la aceleración de partículas (protones) y su comportamiento prodigioso en la interacción con la materia viva, distribuye su efecto de forma favorable en la anatomía humana (precisión) y se generan cambios moleculares más intensos para control de cáncer. Sus gradientes dosimétricos minimizan la irradiación dispersa innecesaria en los tejidos sanos de alrededor. Este efecto es protector de la exposición a irradiación de tejidos normales. Su menor toxicidad es el factor que selecciona las indicaciones en el tratamiento de tumores de difícil acceso o cercanos a órganos de riesgo dosis-sensibles y dosis-limitantes. Se estima que se han tratado más de 200.000 pacientes con protonterapia en los más de 70 centros operativos en el mundo. Los sistemas de cobertura sanitaria financian su recomendación en cáncer de abordaje multidisciplinar complejo o de expectativas de secuelas tardías con soporte socio-sanitario intensivo. En pacientes oncológicos pediátricos el tránsito hacia protonterapia no ha necesitado de estudios comparativos aleatorizados. En pacientes adultos la recomendación de protonterapia se adapta al desarrollo de evidencia en términos beneficio clínico explorando modelos de enfermedad oncológica que exigen protección extrema de órganos vitales o radio-resistencia intrínseca. El debate del valor en salud de la protonterapia oncológica está abierto. El cambio tecnológico y la métrica de su impacto socio-sanitario merecen una actualización critica de presente y futuro."La Fundación Ramón Areces no se hace responsable de las opiniones, comentarios o manifestaciones realizados por las personas que participan en sus actividades."